martes, 16 de marzo de 2021

CHARLOTTE SALOMON

CHARLOTTE SALOMON "LA JOVEN ARTISTA JUDÍA"

Nació en 1917 en una familia judía de alta burguesía que residía en el barrio de Charlottenburg de Berlín. Apasionada de la música y de la pintura, la joven estudió en la Escuela Nacional de Academia de Bellas Artes, donde era la única alumna catalogada "100% judía" por las autoridades de la Alemania nazi.

El crecimiento antisemitismo y el inicio de la Segunda Guerra Mundial, llevaron a la artista a abandonar su hogar huyendo de los nazis y refugiándose en el sur de Francia, donde residían sus abuelos. El suicidio de la abuela le hizo conocer un oscuro secreto de la familia, cuyo historial estaba lleno de suicidios, desde su madre pasando por su tía hasta una prima.

Charlotte Salomon

La revelación fue un duro golpe psicológico para la joven, que se puso a pintar frenéticamente para crear "algo verdaderamente loco y singular". En apenas dos años, entre 1940 y 1942, la artista ideó una secuencia de 784 pinturas, mientras se escondía de las autoridades nazis.

Esta obra maestra "multimedia" incluye cientos de pinturas gouache (realizadas en colores diluidos con agua). Desde la perspectiva del siglo XXI, debido a su complejo entramado narrativo, puede ser considerada como una de las pioneras de la novela ilustrada contemporánea.


La joven judía fue descubierta por los nazis en 1943. La arrestaron y la deportaron al campo de concentración de Auschwitz, donde fue asesinada poco después de su llegada. Antes de que los soldados descubrieran su escondite, la chica confió las pinturas a un amigo y le pidió que las ocultaran de las autoridades nazis.

Su padre Albert Salomon y su madrastra, la cantante Paula Salomon-Lindberg, encontraron las pinturas en 1947. Para conservar el legado de la artista, donaron la colección al museo holandés en 1971.


¿Vida? o ¿Teatro?

Cuenta una historia familiar centrada en un personaje ficticio en parte autobiográfico llamado Charlotte Kann. Las pinturas muestran el desarrollo de la protagonista como artista, su lucha contra la locura e incluso su primera historia de amor mientras va aumentando el poder de un gobierno nazi cada vez más violento.


La historia habla sobre los padres de Charlotte, la depresión de su madre y de enfermedades mentales que aparecieron dentro de su familia. Tras ver como su abuela se quitaba la vida, Charlotte suplica "Dios mío, por favor, no me dejes enloquecer".

Charlotte Salomon registró las superposiciones translúcidas sobre el texto en más de 200 de sus pinturas. Combinando texto e imágenes, estas obras se convierten en narrativas gráficas, contando escenas entrelazadas.



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