Palacio de la Ciudad Prohibida. Pekín |
Lin Zexu |
El comercio del opio fue rechazado y prohibido por el gobierno chino. La puesta en práctica de la abolición recayó sobre el comisionado imperial Lin Zexu.
Los emisarios enviados por los comerciantes británicos e indios quejándose por el quebranto que tal prohibición causaba a sus intereses decidió a la Corona británica a enviar una flota de guerra que finalmente derrotó a la China.
Hong Kong en el siglo XIX |
Este conflicto y su resolución a favor de la potencia imperialista británica facilitó la irrupción en el escenario de otras potencias como Estados Unidos, Francia y Rusia que forzaron a China a firmar diversos convenios que han recibido la denominación de “Tratados Desiguales”. Como consecuencia de ellos, en 1860 China se vio apremiada a abrir otros once puertos al comercio exterior con el correspondiente menoscabo de su soberanía.
La impotencia china para conservar su independencia frente a las potencias imperialistas se acentuó aún más tras la derrota frente a Japón(1894-1895), que le costó importantes pérdidas territoriales, así como a raíz de la sublevación de los bóxers en 1900.
Batalla naval de 1841 |