Corría el año 1924. Gracias a una reforma de la ley electoral y al uso de la violencia, los fascistas italianos habían logrado la mayoría en un sistema que, formalmente, seguía siendo una monarquía constitucional. Mussolini era jefe de gobierno pero aún se proponía gobernar, siquiera por un tiempo, siguiendo las reglas del juego parlamentario. Fue entonces cuando tuvo lugar el asesinato del socialista Matteoti que abrió de manera irreversible el camino hacia la dictadura. Pero ¿quién ordenó aquel crimen que iba a cambiar la Historia contemporánea?
Tras la «Marcha sobre Roma», que llevó al poder a Mussolini en 1922, Matteotti
siguió denunciando públicamente los excesos de los fascistas y, en un discurso
parlamentario de 1924, criticó la tendencia de Mussolini hacia la dictadura y
propuso anular los escaños de los diputados fascistas. En represalia, sicarios
fascistas le secuestraron y le asesinaron diez días después.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.