ANARQUISMO

La gran batalla ideológica de la primera mitad del siglo XIX se libró entre socialistas y anarquistas. Éstos consideraban a los socialistas elementos corrompidos que estaban dentro del sistema de la sociedad burguesa.

El anarquismo creía en la abolición del estado y en una sociedad de personas libres regidas por el orden natural.

En la primera etapa, el representante más importante de esta corriente fue el escritor francés Pierre Joseph Proudhon(1809-1865). Es su obra fundamental, la filosofía de la miseria(1846), propugnada un mutualismo basado en la supresión del dinero.

Según su idea la sociedad debía sustituir el concepto de autoridad por el contrato libre, lo que acabaría con las leyes y las instituciones, su teoría rechazaba el uso de la violencia como miedo de transformación.

El fundador político del anarquismo fue el aristócrata ruso Mijáil Bakunin(1814-1876). Bakunin era mucho más extremista que Proudhon.

Su doctrina defendía la creación de pequeños grupos mutuamente apoyados, y promovía el odio hacia cualquier forma de gobierno.

Creía en el potencial revolucionario de los campesinos y los marginados sociales, y sus ideas influyeron en los artesanos independiente, trabajadores y campesinos excluidos de la industria. Este extendió el movimiento anarquista a Italia, Suiza y España.