Hanna Reitsch nació en Hirschberg (Silesia) el 29 de marzo de 1912 y murió en Frankfurt am Main el 24 de agosto de 1979 a causa de problemas cardíacos. Fue una aviadora alemana célebre por la obtención de varios récords deportivos (más de 40 récords mundiales de altura y velocidad), por su afiliación al partido nazi y sus contribuciones como piloto de pruebas a la Luftwaffe (fuerza aérea alemana en la época nazi) durante la Segunda Guerra Mundial.
Algunos de sus récords son:
1932: duración de vuelo sin motor (5,5 horas)
1933: duración de vuelo sin motor (11 horas 30 minutos)
1934: récord femenino de altura (2.800 metros)
1936: rompió el récord mundial de trayecto en vuelo con planeador para mujeres con 305 kilómetros.
1937: primera mujer en el mundo en ser ascendida a capitán de vuelo.
1937: primera mujer en cruzar los Alpes en un planeador.
1938: la primera persona en volar un helicóptero Focke-Wulf Fw 61 en el interior de un espacio cerrado.
1938: ganadora del concurso nacional alemán de planeadores Sylt-Breslau.
1939: récord mundial femenino en vuelo sin motor.
1943: primera mujer en pilotar un avión cohete.
1956: récord alemán de distancia de planeo (370 kilómetros).
1957: récord alemán de altitud con planeador (6848 metros).
Hanna Reitsch estrechando la mano a Adolf Hitler, después de haber sido ganadora de la cruz de Hierro de segunda clase en la Cancillería del Reich , en abril de 1941.
Su último vuelo bajo el mandato nazi sin duda fue el más complicado. El 28 de abril de 1945 voló junto al General Robert Ritter von Greim a Berlín, ya tomada por los rusos. Llegar desde Munich hasta las afueras de Berlín fue tremendamente complicado, teniendo que realizar diversos vuelos a una altura muy baja para no ser atacados por los soviéticos.
Juntos visitaron el búnker de Hitler en Berlín. Como ya no había ningún aeropuerto en Berlín, tomaron tierra en una avenida (entre la columna de la Victoria y la puerta de Brandemburgo), resultando alcanzados por la artillería soviética. El general llegó al búnker milagrosamente vivo, aunque herido, por lo que tuvo que ser atendido en la enfermería. Allí von Greim fue nombrado por Hitler como nuevo Mariscal del Aire y sucesor oficial de Göring como jefe de la Luftwaffe.
Hanna quiso convencer a Hitler para que huyera de Berlín, pero este se negó. Finalmente, con mucho esfuerzo Hanna logró abandonar la ciudad, cayendo posteriormente (en mayo de 1945) prisionera de los norteamericanos. Estuvo retenida durante 15 meses, sometida a intensos interrogatorios y finalmente liberada en 1946.
Después de la guerra
Tras ser liberada regresó a su vida anterior, a sus competiciones. La aviación siguió siendo lo más importante en su vida, pero no con un fin militar, sino deportivo. En 1952 fue la única mujer que compitió en el Campeonato Internacional de Planeadores de Madrid, donde ganó la medalla de bronce. Tres años más tarde, en el Campeonato de Planeadores de Alemania, quedó en primer lugar, siendo nuevamente la única competidora femenina.
Su pasión por los aviones, también hizo que pudiera disfrutar de su otra pasión, la de misionera. En 1959 se trasladó a la India, donde forjó amistad con Indira Gandhi. Posteriormente, en 1961 compartió vuelos en Estados Unidos con Kennedy. Al año siguiente, fundó en Ghana, junto al presidente Kwame Nkrumah la Escuela Nacional de Planeadores.
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